Empezar en la escuela Infantil supone un cambio significativo y transcendental para los peques, ya que es la primera vez que se separan de sus progenitores y familiares. Implica una salida del medio familiar, en el que el infante se encuentra seguro y protegido, a un medio mucho más amplio en el que las relaciones son distintas. En la escuela van a vivir nuevas experiencias, conocer nuevos lugares, nuevas personas y otros modelos de relación y atención.
El periodo de adaptación es un proceso de transición mediante el cual, el bebé o el niño, descubre y se familiariza progresivamente con la escuela infantil .
Este proceso (educativo y gradual) le permitirá desarrollar su autonomía y sociabilidad.
Cada peque necesita un tiempo diferente para adaptarse al nuevo entorno, para sentirse cómodo, seguro, protegido y con confianza en sí mismo y en las educadoras y educadores. Debe hacer frente a nuevos horarios, nuevas personas, normas e incluso comidas diferentes.
En esta nueva situación, es habitual que el peque experimente sensaciones de inseguridad, abandono o desprotección.
Estas son algunas conductas que pueden tener durante este periodo:
Cada escuela realiza el periodo de adaptación de manera diferente. Lo habitual es que sea de forma escalonada y además permitan a las familias acompañar a los infantes unas horas. En cualquier caso, la presencia de la familia durante este periodo es muy beneficiosa y enriquecedora. De hecho, se recomienda que durante este proceso, sean los progenitores quienes acompañen y recojan a sus hijos e hijas de la escuela, ya que les aporta seguridad.
Aquí os dejo algunas recomendaciones:
- Anticipar lo que va a pasar: Contarles que van a ir a la escuela, van a conocer a su maestra o maestro, van a jugar y a hacer nuevos amigos y amigas…
- Acompañarles y ser paciente: El niño no debe sentir sensación de abandono, la llegada a la escuela debe ser tranquila, sin prisas. Cada peque tiene su ritmo .
- Despedirse del peque: despedirnos siempre de él brevemente, evitando alargar las despedidas. Le ayudaremos a comprender que le decimos adiós por un tiempo y que regresaremos a recogerle. ¡NUNCA DESAPARECEREMOS SIN DESPEDIRNOS!
- Respetar los horarios y rutinas de la escuela.
- No realizar cambios en la vida del peque durante este periodo de adaptación: quitarles el chupete o pañal, cambio de la cuna a la cama…
- Comunicar al centro todo aquello que nos inquiete: el contacto y una comunicación cercana con la escuela favorece el éxito de este proceso.
- Permitir que utilice algún objeto familiar: muñeco de apego, sabanita… para que se sienta seguro.
- No chantajear ni mentir. Algunos ejemplos serían: “Si lloras me pongo triste”, o decirle: “no me voy, estoy fuera esperando” hace que el peque se sienta mal y culpable y que desconfíe del adulto.
- Normalizar sus sentimientos: Debemos permitir que el peque pueda mostrar sus sentimientos a través del llanto o la queja y responder a ello con comprensión y cariño.
- No asustarlos ni amenazarlos con la escuela o con el educador: transmitirles una imagen positiva y real, sin idealizarla.
Duración del periodo de adaptación
Como os podréis imaginar el periodo de adaptación es diferente para cada peque. Algunos sólo necesitan unos días y otros semanas. Ambos casos son normales. Lo habitual es que durante el mes de septiembre casi todos los peques se hayan familiarizado con la escuela.
Por último, os dejo unos cuentos como recurso para que podáis anticipar y trabajar con vuestros hijos e hijas el comienzo de la escuela. Feliz curso ♡
Es tan necesario un período de adaptación como la conciliación familiar. Muy buen explicado y con grandes consejos para los papis (que también lo pasamos mal). Gracias, Silvia.
Gracias Laura. Efectivamente,para las mamás y los papás también es un gran punto de inflexión. Es muy duro separarse de los peques. ♡♥💕
Consejos muy útiles para poner en práctica antes del inicio del cole!
Gracias Silvi!
Me alegra que te sea útil. Un abrazaco ❤
Sólo puedo decir… ME ENCANTAS!!😊❤😍
Y tu a mi bonita💖💖💖